La lejía es un producto de limpieza comúnmente utilizado en hogares e industrias por su efectividad en la desinfección y blanqueamiento. Sin embargo, a lo largo del tiempo, han surgido numerosos mitos sobre su uso y efectos. En este artículo, desmitificaremos algunas de las creencias más comunes y aclararemos las realidades sobre la lejía.
La lejía es tóxica en cualquier cantidad
Realidad: Si bien es cierto que la lejía puede ser tóxica si se ingiere, inhala o entra en contacto directo con la piel en grandes cantidades, su uso adecuado y diluido la hace segura para la limpieza doméstica. Es fundamental seguir las instrucciones del fabricante y usarla en áreas bien ventiladas para minimizar cualquier riesgo.
La lejía es la mejor solución para todos los problemas de limpieza
Mito: Aunque la lejía es muy efectiva para desinfectar y blanquear, no es adecuada para todas las superficies o tipos de suciedad. Por ejemplo, no se debe usar en superficies metálicas, ya que puede causar corrosión, ni en prendas de ropa delicada, ya que puede dañarlas. Además, la lejía no es efectiva para limpiar grasa o suciedad orgánica sin un limpiador adicional.
Mezclar lejía con otros limpiadores la hace más efectiva
Mito: Este es uno de los mitos más peligrosos. Mezclar lejía con otros productos de limpieza, especialmente aquellos que contienen amoníaco o ácidos, puede producir gases tóxicos que son extremadamente peligrosos para la salud. Es crucial usar la lejía sola o seguir específicamente las recomendaciones del fabricante.
La lejía pierde su efectividad con el tiempo
Realidad: La lejía sí puede perder efectividad con el tiempo, especialmente si se almacena de manera incorrecta. La exposición al calor, la luz solar y el aire puede descomponer sus componentes activos. Para asegurarse de que la lejía mantenga su potencia, es importante almacenarla en un lugar fresco y oscuro y utilizarla dentro del periodo recomendado por el fabricante.
La lejía es dañina para el medio ambiente
Realidad: La lejía puede tener efectos negativos en el medio ambiente si se usa en grandes cantidades o se desecha incorrectamente. Sin embargo, cuando se utiliza y se diluye adecuadamente, su impacto puede ser minimizado. Además, existen opciones de lejías ecológicas que están diseñadas para ser menos agresivas con el medio ambiente.
La lejía puede usarse en cualquier proporción para desinfectar
Mito: La efectividad de la lejía depende de la concentración correcta. Usar una solución demasiado concentrada no solo es innecesario, sino que también puede ser peligroso. La proporción estándar para la desinfección doméstica es generalmente una parte de lejía por nueve partes de agua (una solución al 10%). Siempre es importante consultar las instrucciones del producto para asegurarse de estar usando la concentración adecuada.
La lejía mata todos los patógenos de inmediato
Mito: Aunque la lejía es muy efectiva contra una amplia gama de bacterias y virus, incluyendo el coronavirus, no actúa instantáneamente. Es necesario dejar que la solución de lejía permanezca en la superficie durante al menos 5 a 10 minutos para asegurar que los patógenos sean eliminados adecuadamente.
La lejía es una herramienta poderosa en la limpieza y desinfección, pero como con cualquier producto químico, es crucial usarla con conocimiento y precaución. En NASE Distribuciones Canarias puedes encontrar una amplia gama de estos productos. Entra en nuestra tienda online y explora nuestra selección y elige con confianza los productos que te ayudarán a mantener tu hogar seguro y limpio.
